lunes, 19 de septiembre de 2011

CONSTRUIR LA PAZ DESDE EL COMPROMISO PERSONAL


CONSTRUIR LA PAZ DESDE
EL COMPROMISO PERSONAL

Artículo escrito por el Pbro. Fabricio Seleno Calderón Canabal, de la Diócesis de Campeche.

Después de celebrar el 201 aniversario del inicio de la lucha de Independencia de México, aniversario marcado, en algunas ciudades del país, por la poca participación ciudadana por temor a que sucediera algún acto de violencia, quiero seguir compartiéndoles lo vivido en el Tercer Encuentro Mundial de Valores.

Al inicio del segundo día, se realizó un módulo titulado “Compasión: Reconstrucción emocional para un corazón sustentable”, en el cual participaron el Dalai Lama, monje tibetano, Premio Nobel de la Paz en 1989; Shirin Ebadi, exiliada abogada y activista iraní, y Premio Nobel de la Paz en 2003; y Bernardo Kliksberg, economista argentino asesor principal del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) de América Latina y el Caribe.

«Cambiar al mundo, construir un mundo mejor, un mundo de paz, de armonía, no puede venir de arriba; no pueden hacerlo los gobiernos, tampoco las Naciones Unidas», expresó el Dalai Lama.  Sólo se puede construir un mundo mejor «a través del compromiso personal».

«Cada persona debe comprometerse a desarrollar un corazón cálido, a preocuparse por el bienestar de los demás. Esta persona va a contagiar a su familia; la familia a otra familia; y varias familias contagiarán a la sociedad».

El Premio Nobel de la Paz fue presentando una serie de problemas que aquejan al mundo actual y que dificultan la construcción de la paz en la sociedad. Les comparto únicamente dos:

1.- La brecha que existe entre ricos y pobres, que afecta a todos los países y que «es la causa de muchos problemas», ya que «cuando existe este tipo de diferencias, entre la gente que carece de medios y que tiene pocos recursos hay frustración, esa frustración lleva al enojo, el enojo lleva al odio y finalmente termina en la violencia».

2.- El problema de la droga. «La gente que consume drogas no tiene paz interiormente». Esto manifiesta una falla en el sistema educativo pues no se ofrecen a los jóvenes instrumentos para lograr una salud mental e interior, de manera que no necesite recurrir a las drogas.

Recordó que la compasión no es lástima, sino respeto y preocupación auténtica por el bienestar de los demás. «La práctica del amor y de la compasión ayuda a construir nuestra felicidad y la felicidad de la sociedad».

Bernardo Kliksberg habló de «los desafíos éticos que tiene el género humano», que resumió en ocho desafíos o escándalos éticos inadmisibles:

1.- El hambre inexplicable. «Gracias a los progresos tecnológicos, el mundo produce alimentos para alimentar a una población muy superior a la actual, sin embargo uno de cada 6 habitantes tiene hambre severa».

El hambre mata, provoca vulnerabilidad a todas las enfermedades posibles y significa una violación de derechos humanos. «En casi toda América Latina hay un hambre inexplicable. El problema del hambre no es de producción, sino de acceso a los alimentos por la pobreza», no tienen ingresos para comprarlos.

2.- El Agua. El derecho al agua debe ser sagrado. «En el mundo, hay casi mil millones de personas que no tienen agua potable; que consumen agua contaminada». Mueren 2 millones de personas al año por consumir agua contaminada.

3.-  La Mortalidad Infantil. «Mueren 8 millones cien mil niños por año. 25,000 por día; por causas evitables».

4.- La Mortalidad de las madres. «Mueren 350 mil madres durante el embarazo, el parto en pleno siglo XXI». El 98% en los países en desarrollo. «La población indígena de América Latina está en muchos casos en una situación de indigencia médica».

5.- La Discriminación de la mujer.  Hay avances. «Las mujeres en América Latina ganan 30% menos que los hombres en igual responsabilidad». Sólo el 5% de los alcaldes son mujeres. Continúa la violencia doméstica.

6.- El Medio Ambiente. Estamos destruyendo rápidamente la posibilidad de que las futuras generaciones puedan vivir con lo que Dios nos ha legado. Si de aquí a diez años no hay cambios significativos, no habrá punto de retorno.

7.- La Exclusión Juvenil. «Nunca fueron los jóvenes tan maltratados en la historia». En América Latina uno de cada cuatro jóvenes ha quedado fuera del sistema educativo y fuera del ambiente de trabajo. Los jóvenes no tienen mucha esperanza de integrarse a nada en una situación de ese tipo. «Son una bomba de tiempo».

8.- La desigualdad. Es la gran generadora de pobreza. «América Latina es la región más desigual del mundo». Tres mil millones de personas en el mundo están en pobreza. «Disparidades hirientes», le llama la Iglesia Católica.

Cualquier esfuerzo para encontrar soluciones al tema de la inseguridad y la construcción de la paz debe tomar en cuenta estos desafíos éticos, para que puedan adoptarse políticas públicas con rostro humano, donde lo primero sea la gente.