lunes, 25 de octubre de 2010

SAN RAFAEL GUÍZAR Y VALENCIA

SAN RAFAEL GUÍZAR Y VALENCIA, RUEGA POR LAPAZ DE MÉXICO

La fe de nuestro pueblo se ha vuelto a desbordar. San Rafael Guízar Valencia continúa siendo un auténtico misionero pues provoca que las personas se pongan en marcha para buscar a Dios en su vida. Su memoria está viva y su devoción provoca que la fe de la gente se ponga de pie para buscar a Dios en medio de las situaciones difíciles que nos toca sortear en estos tiempos convulsionados.

Cada año llegan más peregrinos a su tumba pero la gran mayoría, que no puede venir hasta Xalapa, lo celebra ardientemente en sus hogares, en sus iglesias y en sus corazones. Es el día de san Rafaelito, del obispo misionero, del pastor de los pobres.

Los fieles lo toman como abogado y como intercesor porque saben que a través de él llegan las súplicas directamente al Señor. En esta ocasión se le han pedido más cosas que de costumbre. Se le pide que interceda ante Dios por la salud de los enfermos, que se pueda encontrar trabajo, que cuide a los familiares migrantes y que haya concordia en las familias.

Pero este año también se han escuchado súplicas incesantes por la paz de México y por la superación del clima de inseguridad en el estado de Veracruz. Asimismo se le ha pedido que bendiga a las nuevas autoridades que asumirán un compromiso trascendental en la historia de Veracruz, a partir del 1º de diciembre.

El panorama no es nada alentador pero la fe va caminando con nosotros y la presencia de testigos tan insignes, como San Rafael Guízar Valencia, nos anima a confiar en la mano bondadosa del Señor que nunca nos ha dejado solos. San Rafael es más actual que nunca porque se le lleva en el corazón y porque su ejemplo de entrega y servicio a los demás sigue siendo una alternativa para reorientar los valores de nuestra vida.

Hoy, más que nunca, resuena en nuestros corazones esta plegaria:

San Rafael, ruega por nosotros, porque estamos sumergidos en la noche obscura de la violencia, la inseguridad, las extorsiones y los secuestros. Ayúdanos a reconstruir un ambiente de paz y de concordia donde los niños y los jóvenes se vuelvan a identificar con la honradez, la sencillez, el amor y la justicia para que de esta forma tengamos la esperanza de estar transformando a las futuras generaciones Concédenos el valor para llevar un mensaje, en el nombre de Dios, a los que provocan el dolor, la violencia y el sufrimiento de sus hermanos. San Rafael Guízar Valencia bendice a este pueblo alegre, fervoroso, generoso y fiel a quien tanto amaste.
 
P. José Juan Sánchez Jácome
Director de la Oficina de Comunicación Social
Arquidiócesis de Xalapa
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